martes, 29 de mayo de 2012

Y por supuesto....RECURRIÓ!

El tipo éste es cansino hasta decir basta; os decía que iba a recurrir este segundo auto de archivo de la denuncia interpuesta por él contra mi por presuntas calumnias e injurias contra los Magistrados de la Audiencia Provincial y.... la recurrió, ¡que poderío financiero!
Afortunadamente una ya se está acostumbrando a la persecución, a las denuncias falsas y al acoso obsesivos a los que me tiene sometida este personaje; si, me estoy acostumbrando, pero ello no quiere decir que no me importe....Yo soy una persona como la mayoría de los ciudadanos: con familia, amigos, con una vida profesional....vamos, de lo más normal, y no estoy imputada por delitos muy graves como "alguno"; por lo tanto estas insidias contra mi persona lógicamente provocan daños y por ello alguna consecuencia tendrá que haber ante tan disparatada actitud ¿o en su egolatría paranoica piensa que esto va a quedar así?

http://www.diariodeferrol.com/index.php/periodico-impreso/ferrol/42840-ferrol-noticia

domingo, 20 de mayo de 2012

Y de nuevo pierde Coté.

Nuestro particular "doctor" comenzó ya hace casi dos años una carrera enloquecida de denuncias contra esta Asociación, en particular contra esta presidenta y por extensión contra tres o cuatro de esos compañeros que él consideró o más vulnerables o más importantes dentro de la Asociación.....¡qué equivocado estás, ya ninguno de los compañeros son vulnerables a tus presiones, ya te han perdido el miedo y el respeto que tan falsamente te habías ganado!, e importantes, importantes son TODOS y cada uno de mis compañeros y tú lo sabes, mal que te pese, vaya si lo sabes.
Pero en esa carrera desenfrenada de denuncias sin sentido, que no son otra cosa que palos en las ruedas de la Justicia, le está tocando perder y perder una tras otra; y como siempre se destacó (y lo sigue haciendo) por ser paranoicamente cabezón recurría cada auto de archivo, cada sentencia faviorable a la Asociación, convencido como está de que la Justicia con él se está equivocando y está cometiendo una terrible cadena de errores e injusticias...¡pobrecito!
Y de nuevo pierde......Esta vez y por segunda vez en la denuncia interpuesta contra mí por presuntas calumnias contra los Magistrados de la Audiencia Provincial; y digo segunda vez porque esta denuncia ya fue archivada en su día por parte de la Juez, y él recurrió solicitando la declaracíón de cuatro compañeros más e incluso la identificación de sus IPs, convencido de que también son "culpables" de las presuntas calumnias. Pues bien se les tomó declaración a esos compañeros y tras practicar todas las actuaciones que se solicitaban la Juez estima que:
"De lo actuado no aparece debidamente justificada la perpetración del delito que ha dado motivo a la formación de la causa, por lo que procede decretar el sobreseimiento provisional de las actuaciones de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 641-1º y, en su caso, en el artículo 779.1.1ª de la Ley de Enjuiciamiento Criminal.
PARTE DISPOSITIVA
SE DECRETA EL SOBRESEIMIENTO PROVISIONAL DE LA PRESENTE CAUSA
procediéndose al archivo de estas actuaciones.

Bueno, claro, ahora lo recurrirá ¡no esperamos menos de tan preclaro juicio!...Oye cerebrito, cuéntanos cómo haces con 3.000 € para pagar y pagar tanta denuncia, recurso y abogados, es que a mí siguen sin salirme las cuentas

miércoles, 9 de mayo de 2012

Los otros "detallitos".

En pasados artículos he descrito con mayor o menor detenimiento las "Clínicas" de Coté, aspectos de su comportamiento e historias vividas por todos nosotros entre aquellas paredes, una pequeña parte de una larga, larguísima pantomima....y lo que queda aún por contar!!
Pero a veces, sin saber bien por qué, recuerdas detalles aislados que te lo traen desgraciadamente a la memoria: un medicamento homeopático en una farmacia, un cesto con cuentos en la habitación de algún niño, la figura de un búho, una caricatura....cualquier detalle, la cosa más tonta te devuelve allí irremediablente.
¿Os acordáis de los pastilleros que durante un par de años nos regalaba por Navidad grabados con su nombre y el de la Clínica?, redondos, plateados, con tres compartimentos interiores para las pastillas y grabados en negro....Lo que no sé es para qué nos los regalaba si nunca (o casi nunca) nos recetaba pastillas, lo de él era pinchar, le gustaba más la jeringuilla que un chupa-chups a un crío. Y hablando de chupa-chups, no estuvo el tío dándonos la vara un mes seguido con la cajita aquella donde ponías un caramelo, la cerrabas, y al abrirla de nuevo había desaparecido el caramelo, claro que luego te lo hacía aparecer....¡y el tipo enseñándonoslo tan feliz, como si fuéramos tontos!
También estaba aquel tarjetero sobre la repisa de la entrada que primero fue de metacrilato y que contenía las tarjetas del Dr. López Pérez PH-DO y todo lo demás, más tarde estarían en el mismo sitio pero sobre una bandejita.
¿Y el árbol de Navidad? ¿qué me decís del árbol "made in USA" que nos ponía cada Navidad en aquella agobiante sala de espera?, con su alfombrilla roja y verde, bordada con Papa Nöel y toda la parafernalia propia de USA; estaba siempre colocado en la esquina, encima de aquella especie de arcón en el que tantas veces nos sentábamos mientras esperábamos por nuestra "dosis".
Pero si había algo realmente de mal gusto, tétrico, horripilante (y creo que ya hablé de ello en otro artículo) era el busto de un indio tallado en madera cuyo rostro era mitad hombre mitad búho...cada vez que tenías que ir a su despacho y lo veías encima del, también horroroso, mueble de madera labrada, es que hasta te entraban escalofríos....bufff, ¡qué cosa tan fea!
Las tazas de la Clínica Mayo (como esas que compras cuando vas de excursión a Roma o a Londres), también en su despacho, en ellas guardaba lápices, bolígrafos ("estilográficas") y hasta plumas Dupont que le habían regalado sus agradecidos pacientes (ja, ja, y re-já).
Luego también estaba el cestón de mimbre con aquellos enormes girasoles que "adornaba" la bañera del cuarto de baño principal, que quedaba allí como un lacito a un cerdo. Y digo baño principal porque muchas veces teníamos que hacer cola para poder ir al baño, pues entrar en el aseo de su despacho, ese donde estaba la nevera con las jeringuillas cargadas de "sabe Dios qué", eso estab vetado para los pacientes, hay quien no pudiendo aguantar más hasta bajó al bar de la esquina...
A mi siempre me llamó mucho la atención el cuadro de la entrada con una caricatura del "insigne médico" realizada por el gran dibujante Xiro (eso sí que era un lujo, mucho me parece para quien es el individuo).
Y sí, claro, el cestón con los libros, cómics y hasta algún juego estropeado que también estaban en la sala para que los niños ocupasen su interminable espera...¡pobrecitos míos!, allí merendaban, comían, dormían sobre el regazo de sus padres o abuelos, hacían los deberes, y preguntaban una y mil veces cuándo se podían ir...¡tan pequeñitos! (pero tiempo habrá de hablar de ellos también).
Si, Coté, tenía detallitos, de pose, de apariencia, pero ahora sabes que todo era parte de la puesta en escena, el atrezzo de una terrorífica obra de teatro que nunca debió estrenarse.