Como ya saben nuestros compañeros este sábado en Coruña tenemos nuestra Asamblea General, ya tocaba; es la primera tras la segunda detención de Coté.
¡Qué diferencia con la anterior, cuántas cosas han pasado...y siguen pasando!
Tendremos un cariñoso y animoso recuerdo para nuestra Mónica, nuevamente ingresada por urgencias, con otro agravamiento, pero como ella misma me dijo (y no me canso de repetirlo) "tranquila Esther que con esto también podemos". Pero la verdad es que cuesta, y mucho.
Nuestras Asambleas son muy diferentes a las de cualquier otra Asociación; en nuestras reuniones se habla de dolor y esperanza, de desánimo y de apoyo solidario, de rabia y de afecto interno.....hablamos más de las personas que de una organización. Se habla en fin, de nuestras heridas, heridas que no parecen cerrar nunca.
Cada vez que estamos juntos es una oportunidad para darnos un abrazo, para felicitarnos por seguir vivos, para acompañar a las familias de los que ya no lo están, pero sobre todo, sobre todo, para sentir una vez más que podemos conseguirlo, que estamos en el camino, que ya falta menos para que se haga JUSTICIA.
Pero que camino tan duro. Cada día descubrimos más cosas y nos gustan menos, cada día sentimos la solidaridad y el apoyo de muchos, pero también sufrimos el desprecio, los silencios y el vacío de algunos. Hemos llamado a muchas puertas y se han abierto pocas, y hay hasta quien, en el colmo de la desfachatez, llegó a ver en nosotros un negocio o una oportunidad de crecer.
El sábado, por mi parte, toca rendir cuentas del trabajo realizado desde la responsabilidad y la confianza que un día depositaron todos los compañeros en la Directiva y en mí, ojalá no hayamos defraudado sus expectativas, pero vaya por delante que un relevo no lo vería como algo negativo sino como un descanso (ya lo he pedido alguna vez) y es que esto es agotador, y confieso que psicológicamente desgasta mucho.
Pero esta Asamblea, esta Asociación, debería sobre todo servir para recordarle a la sociedad que ahí afuera, en nuestros pueblos y ciudades, hay personajillos "disfrazados" de profesionales que están jugando con nuestra salud impunemente, y a las Instituciones que no han hecho bien los deberes respecto de las obligaciones que tienen con los ciudadanos (vigilar, proteger, controlar, sancionar...) nosotros damos fe de ello.
Y para los compañeros de Castellón, Tarragona, Valencia, Andalucía, Extremadura, León, Asturias, País Vasco, Madrid, Navarra, Canarias, Portugal, Londres y U.S.A. (impresiona ¿verdad?, pues es lo que tenemos) que no podéis asistir a la Asamblea por motivos obvios, ya sabéis "no estáis solos", un abrazo y por supuesto PODEMOS!