viernes, 6 de febrero de 2015

¡SIETE AÑOS ESPERANDO POR LA JUSTICIA!

Se cumplen hoy siete años de la primera detención de José Manuel López Pérez "Coté"....¡¡y YA van SIETE AÑOS!!
Ante esto cualquier persona sensata pronunciará una sonora exclamación, reflexionará o hablará de ello durante un rato: "¡qué barbaridad!...., ¡esto no es Justicia!,...¿cómo puede pasar esto?, ...¡pobre gente!...., ¡así está el país!....".
Eso será así cuando eres una persona de bien, cuando estás fuera de esto, pero cuando eres parte.....¡cuando eres parte siete años son 2.555 días que no puedes despachar en una conversación, en una exclamación, porque "eso" te ha acompañado y te acompaña, es parte inseparable de tu vida, cada uno de esos días!
Si mis compañeros y yo tuviéramos que resumir en palabras aisladas, pero llenas de contenido, estos siete años seguro que diríamos: INDIGNACIÓN, DESESPERACIÓN, RABIA, FRUSTRACIÓN, LUCHA (muy solos)....y sobre todo INJUSTICIA. Sí, INJUSTICIA, porque la Justicia que no es inmediata, que no repara el daño con prontitud, pierde su nombre y su ser en el camino.
Pero aquí estamos, aquí seguimos, no por interés, no por venganza....ahora ya se ha convertido en una cuestión de dignidad, la nuestra, la de los que no tenemos derecho siquiera a llamarnos víctimas porque todavía no ha recaído sentencia, y entonces hemos de conformarnos con la cualidad de "afectados"; los que para referirnos a ese individuo hemos de adjetivarle como "presunto" delincuente; los que parece que no tenemos derechos porque todos le amparan a él...
A pesar de todo, con la Administración Sanitaria dándonos la espalda, con la Administración de Justicia inoperante, entre silencios y complicidades, engaños y negligencias...con todo y con más, lo verdaderamente importante, lo único que cuenta es que si NOSOTROS hemos sido capaces de llegar hasta aquí sin duda alguna seremos capaces de llegar hasta el final, Coté nos ha enseñado a ser unos corredores de fondo, puede que maltrechos, pero con TODA nuestra dignidad intacta y expectante para más pronto que tarde volverle a ver como en la foto, y esta vez por muchos años.