Hoy me han notificado la sentencia del juicio celebrado el 15 de febrero en el que Coté me sentaba en el banquillo "acusada de intromisión en su honor y en su vida privada" y la Magistrada ha fallado DESESTIMAR la denuncia y condenarle a costas.
Decir que estoy contenta es poco, ESTOY FELIZ, y más todavía al leer el contenido de la sentencia; el exhaustivo trabajo realizado por su Señoría para aclarar la situación en lo que parecía una evidente colisión de derechos, el mío a la libertad de expresión, y el de Coté a su honor, da como resultado una sentencia digna de ser leída (yo ya lo he hecho cuatro veces).

En la minuciosa exposición realizada por su Señoría aporta Jurisprudencia más que suficiente para aclarar por qué mis/nuestras opiniones y adjetivos hacia Coté no son constitutivas de un delito contra el honor.
Aunque os dejo abajo el enlace con el texto íntegro de la sentencia (que también es la vuestra, la de todos los que expresáis aquí vuestros sentimientos y opiniones), no me resisto a copiar una parte muy, muy especial para mí, y seguramente para todos vosotros, me he tomado la libertad de destacar algunos párrafos que son muy elocuentes:
FUNDAMENTOS DE DERECHO
CUARTO
"Aplicando la doctrina expuesta al caso que nos ocupa, se ha de afirmar que la información contenida en el blog de que se trata es veraz y de interés general, lo cual hace prevalecer los derechos a la libertad de expresión e información sobre el derecho al honor salvo que se hubieran empleado expresiones injuriosas o insultantes, y las contenidas en el blog hay que enmarcarlas en el ejercicio del derecho a la crítica, crítica que si bien se hace de modo mordaz o desabrido, con el empleo de expresiones hirientes, no rebasa los límites de la libertad de expresión e información.........
......La simple lectura de algunos de estos epítetos, así sacados de contexto, no pueden conducir a la estimación de la demanda, porque revelan una cierta mordacidad, pero nada más, "doctorcito, doctorcete, artista, muchacho". Otros, aún expresados en un lenguaje común son ciertos: "gran estafador, cuentista, delincuente, mentiroso"......
.......pero si una persona se hace pasar por médico, no siéndolo, cobra por ello, atiende a pacientes, y causa lesiones, ¿cómo se refieren los ciudadanos a dicha persona? Pues, exactamente como lo hacen los que escriben en el blog (y por eso decimos que es cierto, porque el actor está ya condenado). Si damos un paso más, y muchas de esas personas han sido pacientes del actor, han visto como se le clausuraba una clínica, entraba en prisión provisional, luego sale, y al tiempo vuelve a abrir otra clínica, siendo detenido de nuevo, y dichas personas se enteraron de la actividad presuntamente clandestina del actor, habiendo recibido tratamientos prescritos por él mismo, constando en la causa penal que al parecer no tiene título que le ampare, que ya fue condenado, que al parecer ha obtenido pingües beneficios de dicha actividad, que reinicia una vez puesto en libertad, etc, etc...¿Qué espera el actor? El actor puede tenerse en la más alta estima y consideración, pero no puede esperar ni exigir que se respete una reputación que no tiene en la consideración pública, y mucho menos merece en el grado que reclama..........
.....y sin olvidar lo que acertadamente concluyó el Ministerio Fiscal, quien reconociendo la existencia de calificativos desafortunados, entendió que debía ponderarse quien es el actor y quien la demandada y que la Justicia lo primero que tiene que ser, es justa. Entiende Su Señoría que estimar la demanda y por lo tanto, además de los pronunciamientos declarativos solicitados y de condena de hacer, condenar a la Sra. Fontán Prado al pago de 4.265.000 € (o cualquier otra cantidad que se considerase adecuada) sería objetiva, manifiesta y radicalmente injusto"
Antes de nada MUCHAS, MUCHAS, MUCHAS GRACIAS a mi hijo mayor, a mi Fernando, a Javier, a nuestra abogada Eva y a los compañeros que me acompañaron aquel 15 de febrero; a los compañeros y amigos que me dieron ánimos por sms, e-mail o personalmente (especialmente a esa amiga que nunca me falla y a la que le encanta ver que la rueda gira).
Y a tí Coté, (aunque recurras) sencillamente la Magistrada ha puesto negro sobre blanco lo que todos, ya TODOS, pensamos sobre tí, que después de todo lo que has hecho, NO TIENES HONOR!!
PD: Compañeros, amigos, esto no significa barra libre al escribir, manteneos en la línea acostumbrada en vuestros comentarios, porque nosotros, aunque a veces perdamos los nervios a causa del dolor y la rabia, sí tenemos dignidad y honor.